Después de vernos Nerea y yo varios capítulos de La Familia Crece en el ordenador, y estando a puntito de cenar tortillita de patatas casera, nos llamó Lola desde la cocina.
Cuando entramos, vimos a un gato negro tumbado en una de las sillas, muy cómodo y manso.
Cuando le preguntamos a Lola, nos dijo que había entrado por la ventana de la cocina (que

Cuando nos acercamos, el gato estaba perfectamente limpio y aseado, como si su casa estuviera en este mismo barrio y saliera de excursión de vez en cuando, incluso como si estuviera muy acostumbrado a entrar a esta casa en particular.
La gata es negra, preciosa y muy suave, además de muy cariñosa. No nos tiene nada de miedo y se deja acariciar sin ponerse nerviosa. Le dimos un poco de tortilla y ahí se quedó hasta que, supongo, cuando Nerea y yo nos acostamos, Lola y Pin la dejarían salir cuando se quiso ir.
La hemos llamado Tiky, así en intimidad aunque ella tenga su propio nombre. El nombre es Kitty al revés, como la gatita de anime.
Mira por donde ya tenemos mascota, y además una que va y viene cuando quiere y a la que apenas hay que alimentar porque siempre viene comida de su cas y su dueño/a.

Como sigamos así, lo aviso, aquí los inquilinos también pagan alquiler, ¿eh?
*Click encima de las fotos y se agrandan.
1 comentarios:
jajajaja, esos inquilinos q vienen comidos y aseados molan xD además es preciosa *_*
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