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sábado, 17 de enero de 2009

Se busca Belga

¡Qué fuerte lo que nos ha pasado con el belga, Cédric, que vivía (nótese el uso del tiempo pasado) con nosotras en la casa!
Cuando llegamos Nerea y yo a Galway y vimos la casa tan limpia, hay que reconocer que nos sorprendió, porque como ya he comentado otras veces, Cédric no destacaba precisamente por limpio ni aseado. Nunca se me olvidarán esos pies descalzos andando por la casa, arrastrando la mierda de todas las habitaciones, para luego meterse en la cama sin lavarse y sin cambiar las sábanas en mes y medio que pasó aquí. Qué asco más gordo.
Antes de ayer vino la casera, Christine, a cobrarnos supuestamente, pero al estar Nerea y yo en clase, y Lola dormida, sólo se encontró con Margarita y le contó el por qué Cédric ya no estaba.
Parece ser que sobre el 22 de Diciembre Cédric quedó con ella para pagarle el alquiler (300€) y la factura de la electricidad y el aceite (unos 70€). Llegó ella el día acordado, pero al no abrirle nadie la puerta ni contestarle él al móvil, pensó que estaba dormido. Volvió más tarde, y harta de no tener respuesta, entró en la casa con su llave.
Cédric había volado, se había ido sin pagar un duro, y se fue a lo grande, como digo yo.
Christine nos explicó que cuando entró en la casa, estaba el salón lleno de botellas de cerveza vacías, la mesa de la cocina llena de varios platos con comida medio podrida, en los quemadores sartenes y ollas con restos de comida pegados y secos. Le dije a Christine que a Nerea le faltaban dos cebollas y a mí un paquete de espaguettis (que asumí él nos habría robado), y contestó Christine "Ah! Entonces eran tus espaguettis los que estaban desperdigados por toda la cocina...!". Qué asco. El frigorífico (que ella nunca llegó a abrir) nos lo habíamos encontrado Nerea y yo con varias cosas en mal estado y un plato de comida hasta con moho. Pero claro, nunca podíamos imaginar lo demás.
Cuando Christine entró en su habitación por último, se encontró el suelo lleno de condones usados. Qué cerdo!
Para Christine fue un trastorno, porque al día siguiente se iba a Nueva York de vacaciones, y tuvo que atrasar su viaje un día para poder limpiarlo todo...
Por todo eso, se busca a un belga. Si lo encontrais por casualidad por ahí, traedlo rápidamente a Galway, que hay cuatro compañeras de piso y una casera que están deseando darle una paliza.

2 comentarios:

Diahna Desastre dijo...

pero que cacho de cabr*n!!!!! por no decir cerdo (condones usados por el suelo >_<)

Qué os dijo la casera? habéis tenido que pagar vootras su parte??

Eámanë dijo...

Pues en principio la renta no tenemos que pagarla aunque a mí me mosquea la factura esa de 70 euros por el aceite... no sé, espero que no nos toque pagar el pato :S.